Durante el año, las parejas están tan ocupadas con sus quehaceres que no tienen tiempo para dedicarse el uno al otro, para quererse, ni siquiera para cansarse el uno del otro o discutir. Pero llegan los meses de verano, con las vacaciones, el tiempo libre y también el calor que siempre nos vuelve algo más irascibles, y es cuando viene el problema, sobre todo si no se comparten las mismas aficiones, los mismos puntos de vista y, a veces, incluso se agravan cuando hay niños de por medio en la pareja.
Las estadísticas muestran que es precisamente tras las vacaciones de verano cuando se produce un mayor número de divorcios y de rupturas en las parejas. Si bien es cierto que no se le debe echar la culpa en sí mismas a las vacaciones, sino que suele tratarse de relaciones en las que ya existía una crisis previa y que, a raíz de pasar más tiempo juntos, se acentúan las diferencias y, con ello, las discusiones.
Vamos a señalar las circunstancias que suelen acarrear la mayoría de los conflictos y algunas claves para evitar que sucedan:
# Problema 1: La planificación de las vacaciones
El destino elegido, la fecha o la duración del viaje pueden desencadenar una discusión de pareja. Probablemente a uno le gustará más la playa y al otro la montaña o las visitas culturales; uno prefiera hacer planes de día y al otro le guste trasnochar…Solución:
Es importante ceder y ser flexible, ya que no es bueno que sea siempre el mismo de la pareja el que se sacrifique, así que debemos tratar de llegar a una solución de compromiso o de buscar un término medio.
Otra posible solución consiste en dividir las vacaciones en dos partes con actividades muy diferentes para que ambos queden satisfechos. O incluso turnarse en la elección del tipo de vacaciones un año cada uno. Recuerda que las posturas inflexibles fomentan la negatividad en la pareja, se trata de disfrutar del tiempo juntos, no de convertirlo en un pulso a ver quién gana.
Además, es importante involucrarse en la preparación y planificación de las vacaciones, que tu pareja te vea participativo e ilusionado ante la perspectiva de unos días juntos. Recuerda que las vacaciones son de los dos y, si no te gusta el plan establecido, pronto se pondrá de manifiesto. Además, si no colaboras, pensará que ya no tienes la misma ilusión en pasar un tiempo a solas que al principio de la relación.
# Problema 2: Entretener a los niños
Los hijos son una bendición para la pareja, pero también a menudo son una fuente de conflictos, sobre todo si no se coincide en la forma de educarlos. También con frecuencia muchas parejas suelen cargar desigualmente las tareas del hogar
y eso crea mucha frustración. En verano, nuestros hijos rompen con los horarios y disfrutan de mucho tiempo libre, ya que no tienen colegio, y a menudo sobrepasan nuestro aguante con su derroche de energía. Además los niños se suelen portar peor ya que se ven el centro de atención y tratan de monopolizar a sus padres.
Solución:
Comparte las tareas con tu pareja durante las vacaciones. Ahora no hay excusas ya que los dos tenéis el mismo tiempo libre: todo el día. Ayuda a preparar la merienda y la bolsa de la playa de los niños. Así de paso pasaréis más tiempo juntos y fomentareis la complicidad, ya que el sentimiento de apoyo es fundamental en la pareja. También es un buen momento para pasar más tiempo con tus hijos y participar de actividades al aire libre.
# Problema 3: Aburrirse
Mucha gente tiembla ante la perspectiva de pasar todo el día con su pareja. A veces no sabemos de qué hablar, algo de lo que no nos damos cuenta durante el resto del año, ya que, con las prisas, nos falta tiempo para comunicarnos. Es en las vacaciones cuando la rutina nos acaba pasando factura.Solución:
Recuerda que el aburrimiento es subjetivo, es decir, una pareja puede divertirse viendo una película sentados en el sofá de su casa mientras que otra lo hará estando en la isla más exótica y alojada en un carísimo hotel. Si nos aburrimos con nuestra pareja, suele ser consecuencia de otros problemas como la falta de comunicación, la rutina... Así que no hay excusas. Aprovecha este período para conversar de las cosas pendientes y ponerte al día de aquellas cosas que te preocupan. La comunicación es uno de los pilares fundamentales de cualquier relación de pareja. Las vacaciones también son el momento ideal para planificar nuevos proyectos en común de cara a la vuelta, eso hará que la ilusión se recupere.
# Problema 4: Agobiarse
Acostumbrados a compartir un par de horas al día durante el resto del año, se nos puede hacer asfixiante estar las 24 horas del día juntos.Solución:
No es necesario que pasemos todo el día pegados. Es beneficioso que cada uno tenga su espacio. Una solución es quedar por separado con amigos y familiares. Si estás fuera de tu ambiente habitual, aprovecha para pasear algún rato tú solo o aprovecha para hacer alguna actividad de ocio que no puedas compartir con tu pareja.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Si deseas inscribirte a un curso, taller, conferencia llama al 448 29 45 en Medellín. Escribe aquí tus comentarios